Se trató de una persona de 52 años de Mazatlán; autoridades médicas recomiendan h...
Se trató de una persona de 52 años de Mazatlán; autoridades médicas recomiendan hidratación constante y no exponerse a las temperaturas; especialistas en la zona norte aseguran que este problema está controlado en la región Culiacán, Sin.- El primer deceso por golpe de calor ya se registró en el puerto de Mazatlán, donde una persona de 52 años de edad murió la madrugada del pasado sábado, informó el secretario de Salud del Gobierno del Estado, Ernesto Echeverría Aispuro. Detalló que la persona fallecida laboraba en los muelles del puerto y debido a que no combinaba su trabajo con sol y sombra, además no consumía líquidos, le provocó un desmayo y posteriormente su deceso. La víctima fue auxiliada por elementos de Cruz Roja quienes la trasladaron a un hospital hasta donde llegó con una temperatura superior a los 42 grados, lo cual impidió salvarle la vida.
"Se puede considerar que es el primer caso de la temporada de calor que realmente se comprueba que es por una insolación o por un golpe de calor", puntualizó. Echeverría Aispuro hizo un llamado a los padres de familia para que protejan a sus hijos, y a las personas que hacen deporte y laboran bajo los rayos del sol, a cuidarse hidratándose constantemente, ya que en los últimos días se han tenido temperaturas superiores a los 44 grados centígrados a la sombra. Están controlados golpes de calor en la zona norte No se han presentado decesos o consecuencias graves por los golpes de calor en el municipio de Ahome, gracias a que la población ha asumido las recomendaciones y cuidados ante las altas temperaturas, manifestó el director de Salud Municipal, Ricardo de la Cruz Zepeda.
"Ahorita no hemos tenido golpes de calor intensivos, estamos controlados. La gente ha estado cuidándose, niños chiquitos, más que nada hay que cuidarlos mucho, los ancianos mayores de sesenta años, y la tarea es evitar el exceso de sol", señaló.
Dijo que lo primordial es abstenerse de salir a la intemperie entre las doce y las cuatro de la tarde, que es cuando los rayos ultravioleta ocasionan daños más graves en la piel.
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