Culiacán, Sinaloa.- En el marco de los 16 Días de Activismo contra la violencia hacia las mujeres y las niñas, la Secretaría Ejecutiva del ...
Durante esta conferencia, que tuvo el propósito de proporcionar herramientas claves de prevención y atención a quienes forman parte de la Secretaria Ejecutiva Estatal y de los municipios, la Directora Ejecutiva de Guardianes A.C., María del Rosario Alfaro Martínez dijo que en 2020 la Red por los Derechos de la Infancia en México dio a conocer que cuatro de cada 10 niñas, niños y adolescentes han sufrido violaciones sexuales en sus entornos más cercanos y cotidianos.
Explicó que existen tres niveles de prevención que todas las personas deben de conocer para evitar sean vulnerados y/o restituir los derechos de la niñez y la adolescencia.
Prevención primaria: Busca evitar que el maltrato y la violencia sexual en la infancia y la adolescencia ocurran en las personas que aún no la han vivido, con el fin de preservar el derecho de niñas, niños y adolescentes a una vida libre de violencia. La prevención secundaria: Se encamina a detectar oportunamente el maltrato y la violencia sexual en la infancia y la adolescencia para establecer medidas adecuadas para su tratamiento. Y la prevención terciaria: Comprende las medidas dirigidas al tratamiento y a la rehabilitación de niñas, niños y adolescentes que han vivido maltrato y violencia sexual, con el fin de restituir sus derechos.
Alfaro Martínez añadió que las víctimas nunca quieren contar que sufrieron un abuso, porque creen que nadie les va a creer y para ello existe lo que dentro de la asociación llaman los primeros auxilios emocionales, que son una metodología sencilla, para la que no se necesitan estudios psicológicos, que da habilidades para escuchar a una víctima cuando por primera vez habla de su abuso sexual. Esta metodología sirve para que este primer momento sea una experiencia de contención que brinde la fuerza necesaria, para que la persona que ha sido víctima pueda entrar con más impulso a un proceso de sanación y de denuncia legal.
En muchos casos, dijo, existe la revictimización, que implica el mayor riesgo que sufren las víctimas de abuso sexual de experimentar otros acontecimientos violentos a lo largo de su vida. Esta consecuencia del abuso sexual supone que las investigaciones deberían centrarse más en evaluaciones amplias que tengan en cuenta la experiencia de diferentes acontecimientos de violencia interpersonal a lo largo del desarrollo para poder establecer los efectos reales y específicos de cada tipo de victimización.
Para finalizar dijo que muchas personas no recuerdan hasta que están escuchando a través de este tipo de conferencias, que vivieron una situación de esta forma y es importante que sepan que aun están a tiempo de sanar.
Por su parte, la Secretaria Ejecutiva del Sistema Estatal de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA) Nuria Alejandra González Elizalde señaló la importancia de que niñez y adolescencia conozcan del auto-cuidado y respeto de su cuerpo.
Debemos dijo, con un lenguaje claro, sencillo y con información de acuerdo a su edad y desarrollo, optimizar la comunicación y facilitar el diálogo.
Añadió que en la medida que niñez y adolescencia sean considerados como sujetos de derecho, se podrá combatir de manera eficaz este tipo de vulneración a sus derechos.
“Es por ello que desde Sipinna Sinaloa consideramos urgente identificar aquellos factores de riesgo y muy necesario mejorar las herramientas para la prevención, atención y actuación en casos de abuso sexual infantil”, puntualizó.
Para finalizar manifestó que en definitiva el fin es siempre evitar el abuso, pero cuando ya existe una circunstancia como esta, es necesario que el Sistema se active y se logre una intervención eficaz en el diagnóstico y tratamiento de la niñez y adolescencia abusada.