Transición Oswaldo Villaseñor El PRI de Sinaloa tuvo ayer su asamblea estatal y lo hizo de manera presencial. Los priistas de nuevo estuvie...
Transición
Oswaldo Villaseñor
El PRI de Sinaloa tuvo ayer su asamblea estatal y lo hizo de manera presencial. Los priistas de nuevo estuvieron cara a cara para decirse sus verdades o verdades a medias.
La actual presidente, la diputada Cinthia Valenzuela, se la jugó y se la jugó bien al realizar la asamblea de manera presencial y no virtual para darle oportunidad a los priistas de que se expresen con toda libertad.
Los tiempos están polarizados y en el PRI no es la excepción. ¿Qué hacer con los priistas que están aceptando posiciones de trabajo en los gobiernos Morenistas? Esa es una gran interrogante.
Es un debate que se abre para discutir entre la lealtad ideológica y la necesidad de comer de muchos priistas de carrera. Es pues, no cometer el peor error para un político que es quedarse fuera del presupuesto.
En el caso de Sinaloa, los ejemplos ya son muchos, pero muchos. No se trata de uno solo. La lista de priistas y de familiares de priistas sigue y sigue creciendo.
Y esta circunstancia, obliga a recordar el candado que tiene el PRI. “Si un priista acepta un cargo en el gobierno de otro partido, debe primero solicitar permiso a su Consejo Político”.
¿Cuántos priistas le pidieron permiso para aceptar cargos en el gobierno Morenista Estatal o Municipales? Se antoja que ninguno.
Y es a partir de ahí, cuando señalamos que sería un grave error de la actual dirigencia Priista aplicar ese candado y nos planteamos una pregunta. ¿Va la actual dirigencia del PRI por una refundación Moral o va por el apoderamiento de las estructuras del partido?
¿Se está ante el surgimiento de un nuevo Jesús Reyes Heroles o ante la personificación de un nuevo Roberto Madrazo?
Vale la pena recordar lo escrito el pasado 3 de Noviembre.
1.-La negativa de licencia a la militancia priista solicitada por el ex gobernador Quirino Ordaz y negada por el Consejo Político Nacional abre sin lugar a dudas un intenso debate. ¿Viene una refundación moral en el partido o hay un apoderamiento del partido con miras al 2024?
Y es que en definitiva, el caso del ex gobernador de Sinaloa, no es el único que deberá analizar el Consejo Político Nacional.
Hay otros casos más de ex gobernadores que han sido invitados por el presidente López Obrador a aceptar un puesto administrativo en su gobierno, o infinidad de priistas que aceptaron un cargo en gobiernos estatales o municipales.
La chamba es la chamba y como dicen luego, el peor error para un político es vivir fuera del presupuesto público.
¿Irá a negar permisos el Consejo Político del PRI a todos esos priistas o se los concederá?
¿Se quedarán seis años o más sin trabajo los priistas para conservar su lealtad a su militancia o habrá una renuncia masiva de militantes en el mejor de los casos o expulsión masiva en el peor de los casos?
Y es que la suerte de uno deberían de correrla todos en igualdad de circunstancias. ¿O habrá permisos y militancia de manera selectiva?
¿Qué busca Alejandro Moreno? ¿La Refundación Moral del PRI o adueñarse del juego presidencial y del partido rumbo al 2024?
¿Estarán los priistas ante la encarnación de un Jesús Reyes Heroles o ante la encarnación de un Roberto Madrazo? Eso pronto se sabrá.
Hasta ahí lo escrito el pasado 3 de noviembre.
2.-Al día de hoy, el PRI estatal ya seleccionó a sus nuevos consejeros estatales que habrán de participar en la Asamblea Nacional.
La pregunta es. ¿Cuántos nombres de priistas llevan en la lista que aceptaron cargos en gobiernos Morenistas y cuantos más utilizaron sus influencias para colocar a familiares y amigos?
¿Los obligarán a someterse a la cláusula de solicitar permiso a la militancia o simple y sencillamente se les expulsará en automático?
Pero lo peor del caso. ¿A cuántos priistas les importará pensar en su lealtad ideológica hacía su partido y rechazar las oportunidades de trabajo que su partido y gobiernos ya no le pueden ofrecer.
Hasta ahorita no se ha conocido el caso de un solo priista que haya rechazado una oferta de trabajo para conservar su militancia en el partido.
3.-Así con esa nueva realidad, el PRI hará su asamblea nacional y no faltará el histórico grito para mover a las multitudes. ¿Y dónde están los priistas de Sinaloa? Hoy la respuesta para validar su presencia por primera vez, no podría ser igual a la de siempre.
Hoy la respuesta puede ser otra. ¿Y dónde están los priistas de Sinaloa? En Morena, podría ser la nueva respuesta. ¿oh no?
Habrá que estar pendientes.
PASO A PASITO.-Por fin se pudo realizar la sesión de cabildo en Mazatlán donde efectivamente los regidores del PAS autorizaron las propuestas del alcalde Luis Guillermo Benítez para que por fin el Ayuntamiento ya tenga ahora sí oficialmente a un nuevo Secretario, Tesorero y Oficial Mayor.
Camina, camina el gobierno del Químico Benítez y eso es bueno. Gana la gente de Mazatlán.
OTRO PASITO.-Parece una obra de teatro escenificada en episodios. Primero el Presidente desacredita a las policías estatales y municipales y las acusa de estar infiltradas con el narco.
Luego crea a la Guardia Nacional para poder garantizar la seguridad, pero no combate a la delincuencia y la usa para otras tareas.
Luego se desborda la violencia y los asesinatos crecen y crecen. Ya se rompieron todos los records de asesinatos.
Luego el presidente le da dinero a manos llenas al Ejército y a la Marina, y de paso les da el control de los puertos y aduanas. ¿Por dónde entran los precursores químicos para las drogas sintéticas como el fentanilo del que tanto se quejan en Estados Unidos?
Luego se descubre innumerables actos de corrupción en el dinero manejado por el Ejército en las magnas obras de infraestrutura hechas por el Gobierno Federal.
Luego viene el apoyo de parte del Ejército y la petición pública de que hay que apoyar a la 4T y al actual régimen de Gobierno.
Luego viene el decreto para decretar como casos de seguridad nacional las magnas obras del Presidente para impedir que sean auditadas y fiscalizadas y con ello evitar rendir cuentas. No quieren ser exhibidos nuevamente.
Y ya para variar, ahora sí, con la violencia desbordada, con la exigencia gringa de actuar en contra de los narcos, con las policías municipales y estatales desmanteladas por falta de dinero, el gobierno anuncia el despliegue de 100 mil soldados en las calles.
¿Cómo se llamará la obra a presentarse? La dictadura militar. ¿Oh No?
