Foto: AFP Washington DC, Estados Unidos.- El magnate Donald Trump, quien ha caído en las encuestas, también dejó de acaparar ayer refl...
Washington DC, Estados Unidos.- El magnate Donald Trump, quien ha caído en las encuestas, también dejó de acaparar ayer reflectores en los debates.
En un acalorado tercer debate entre los aspirantes del Partido Republicano a la Casa Blanca, fueron los demás precandidatos quienes brillaron.
En particular, el senador por Florida e hijo de migrantes cubanos, Marco Rubio, quien se defendió contra una serie de cuestionamientos por parte de los moderadores de la cadena de televisión de cable CNBS, especializada en temas económicos.
“Rubio ha sido el candidato más disciplinado, y eso se notó. Está muy seguro de sí mismo”, admitió un partidario del ex Gobernador floridano Jeb Bush al sitio web Politico.
El senador, por ejemplo, se defendió contra críticas de que ha faltado a varios votos en la Cámara alta por hacer campaña. Llegó preparado con un listado de anteriores candidatos presidenciales que no estuvieron presentes en muchas más sesiones que él.
Y cuando Bush, su mentor político, le reprochó las faltas, Rubio hizo quedar mal al ex Gobernador.
“La única razón por la que estás haciendo esto (atacarme) es porque estamos compitiendo por la misma posición y alguien te ha convencido que atacarme te beneficiará”, espetó el senador, quien se pelea con Bush el dinero de donantes floridanos.
Después, Rubio aprovechó señalamientos sobre su endeudamiento personal para hablar sobre la importancia de apuntalar a familias de clase media.
Con su respuesta, que recibió muchos aplausos, logró criticar a la moderadora que le lanzó la pregunta y hasta a la favorita del Partido Demócrata, Hillary Clinton.
“No me preocupan mis finanzas, sino las de todos los estadounidenses que batallan por que no hay trabajos”, declaró Rubio
Mientras, Trump se remitió a reiterar respuestas que ha dado anteriormente sobre sus posturas migratorias y su historial empresarial.
“La gente dice: ¿Cómo vas a hacer que México pague (por el muro)Un político no va a lograr que ellos paguen (por el muro). Pero yo puedo”, dijo el magnate inmobiliario.
De hecho, según un cronómetro del diario The New York Times, Trump quedó en tercer lugar de uso de palabra, a diferencia de en los dos encuentros anteriores -en Ohio y California- cuando había duplicado el tiempo del resto de aspirantes.
El magnate no sólo ha caído en uso de la palabra. Encuestas recientes indican que el neurocirujano Ben Carson lo empieza a desplazar en las preferencias de voto para las internas republicanas.
No obstante, Trump y el médico evitaron enfrentamientos directos.
Pelean con moderadores
Una buena parte de las peleas en el debate de ayer no se dio entre los precandidatos, sino con los moderadores.
Reporteros del canal CNBC fueron criticados tanto por los presentes en el podio como por analistas de postular preguntas muy sesgadas y de no estar bien preparados.
Incluso, el público abucheó al moderador Carl Quintanilla cuando cuestionó al neurocirujano Ben Carson, de los punteros en las encuestas, sobre un anuncio de una farmacéutica del que el precandidato dijo no haber sido parte.
También se burlaron de Becky Quick, quien terminó retirando una pregunta a Donald Trump por no tener a la mano las declaraciones que pretendía cuestionar.
“Las preguntas que han sido hechas hasta ahora en el debate dejan claro por qué los estadounidenses no confían en los medios. Esta no es una pelea de perros, las preguntas no deberían estar diseñadas para hacer que nos ataquemos mutuamente”, espetó el senador texano Ted Cruz, entre aplausos de los espectadores.
Las críticas llegaron hasta lo más alto del Partido Republicano.
“La actuación de los moderadores de CNBC fue muy decepcionante, y sólo hizo daño a su canal, nuestros candidatos y a los votantes.
“CNBC debería estar apenado”, espetó Reince Priebus, líder del Comité Nacional Republicano.