Ciudad de México.- Debido a la importancia que tiene el agua para la sobrevivencia de los seres humanos, la poca disponibilidad del recurso,...
Ciudad de México.- Debido a la importancia que tiene el agua para la sobrevivencia de los seres humanos, la poca disponibilidad del recurso, deficiente administración y gestión, el Senador Francisco Salvador López Brito presentó hoy junto con un grupo plural de legisladores, iniciativa que crea una nueva Ley General de Aguas.
La propuesta presentada al pleno del Senado pretende que la nueva ley defina las bases, apoyos y modalidades para el acceso y uso equitativo y sustentable de los recursos hídricos, así como establecer la participación de la Federación, las entidades, los municipios y la ciudadanía para alcanzar dichos fines.
El Senador López Brito explicó que iniciativa de nueva Ley General de Aguas fue elaborada con la participación de más de 450 investigadores e integrantes de organizaciones civiles, y pretende reglamentar el artículo 4 constitucional, en lo relativo al derecho humano al agua, reformando estructuralmente el marco jurídico de la gestión del agua, dándole no solamente un carácter como un elemento natural susceptible de apropiación, sino como la sustancia misma de un derecho humano, explicó López Brito.
El Senador Sinaloense, celebró dicha iniciativa y se sumó a este gran proyecto que establece el reconocimiento y restauración de los derechos del agua y territorio de los pueblos originarios, ya que como la ley contempla, toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible.
En esta iniciativa, también se propone la gestión planificada de participación ciudadana, la creación de una contraloría social, en la cual sean los consejos ciudadanos los que se encarguen de la supervisión del uso del líquido en cada región del país, dándole prioridad al consumo humano sobre el comercial; entorno a metas nacionales: agua para todos, para ecosistemas y para la soberanía alimentaria, fin a la contaminación, la destrucción de cuencas y la vulnerabilidad a inundaciones y sequías.
"La enérgica participación ciudadana podrá corregir las graves crisis que han proliferado bajo la responsabilidad de la Comisión Nacional del Agua, como resulta el sobreconcesionamiento, acaparamiento, contaminación, destrucción de cuencas o acuíferos y su impacto negativo sobre ecosistemas lagunares, manglares, la flora, fauna y la pesca en nuestro país", finalizó.