Martes 31 de enero de 2012 Al referirse al reciente ajuste al precio de la tortilla, la Diputada Gloria Margarita Santos Aguilar, C...
Martes 31 de enero de 2012
Al referirse al reciente ajuste al precio de la tortilla, la Diputada Gloria Margarita Santos Aguilar, Coordinadora del Grupo Parlamentario del PRD, señaló que los aumentos a los precios de los productos básicos van más rápido que los que registran los incrementos salariales, particularmente el salario mínimo, contribuye de forma importante a ensanchar la pobreza y la desigualdad social.
Citó también que en Octubre último, en tribuna reveló información en el sentido de que Sinaloa es de los estados con los más bajos ingresos salariales en el país, ya que mientras el promedio nacional es de 249.47 pesos diarios, en la entidad es apenas de 184.10 pesos, ubicándose en el último lugar de los 32 estados de la república.
Información que calificó de preocupante, habida cuenta que en el país se percibe el segundo salario mínimo más bajo de América Latina, y sólo el 18 por ciento de la población obtiene ingresos suficientes para cubrir sus necesidades de salud, educación, vivienda, servicios, alimentación y seguridad social, y que esa misma información ayudaba “a explicar por qué Sinaloa ha sido uno de los estados donde más se ha extendido la pobreza alimentaria en los últimos años”.
Santos Aguilar, mencionó que en Diciembre, el consejo de representantes de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos acordó un aumento de 4.2 por ciento a esas percepciones para el próximo año, lo que significa un alza promedio de 2.45 pesos diarios, cantidad que consideró, no alcanza ni para un medio viaje en un camión urbano en las ciudades de Sinaloa; en la última década, dijo, el salario mínimo aumentó 61 por ciento frente a un 71.4 de la canasta básica, perdiendo el 14.6 por ciento de su poder adquisitivo.
“Esta realidad irrefutable llevo a que la semana pasada la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico –OCDE-, catalogara a México entre las naciones con mayor desigualdad en salarios y distribución de la riqueza, por lo cual por tercera ocasión el organismo lo clasificó como muy desigual, considerándolo además con alta tasa de pobreza, con un ingreso disponible por hogar que se ubica muy por debajo de los otros integrantes del organismo. La desigualdad entre los salarios de quienes más ganan y los que perciben el salario mínimo cada vez se hace más grande, situación que se ha agravado desde 1985, y aunque la OCDE no es explícita, la fecha coincide con la implantación de las políticas neoliberales en México”, concluyó.