Transición Oswaldo Villaseñor No es un tema del cual acostumbro hablar ni discutir con frecuencia. No lo conozco mucho de fondo que digamo...
Transición
Oswaldo Villaseñor
No es un tema del cual acostumbro hablar ni discutir con frecuencia. No lo conozco mucho de fondo que digamos, lo reconozco, pero ayer fue tema en la mesa de análisis y había que opinar.
El criterio aplicado para dar un punto de vista, fue netamente sentido común. No soy experto, lo reitero.
Es un tema que ahí está, en la mesa de las discusiones de muchos Sinaloenses y que en estos días le golpea la cara y manda una señal de desánimo a la sociedad al ver o pensar que todo pareciera seguir igual al pasado.
La verdad; yo diría, todo es cuestión de enfoque. Nos referimos a la infiltración de la delincuencia organizada a las instituciones de seguridad, a la urgente necesidad de la limpia de malos elementos en los cuerpos de seguridad, a la evidente corrupción que aun permea en estos y a la pretensión del Gobierno Federal de recortar recursos a las policías municipales y estatales bajo esos argumentos. ¿Es el inicio del desmantelamiento de estos cuerpos de seguridad? Esa es la pregunta de fondo.
Como lo advirtiera el general Sergio Aponte Polito muchos años atrás aquí mismo en Sinaloa. Si se quiere combatir de verdad a la delincuencia empiecen primero por limpiar a las policías.
La visión del general y su advertencia, casi 20 años después, sigue retumbando fuerte.
¿Pero por qué todo es cuestión de enfoque?
Veamos por qué.
1.-Que agarraron a dos agentes de la policía municipal de Culiacán junto con un civil -al parecer haciéndole el trabajo sucio a un grupo delictivo- en los momentos en que llevaban a una persona privada de su libertad y con huellas de tortura.
2.-Evidentemente así fue y evidentemente habla precisamente de que los cuerpos de seguridad aún siguen infiltrados y la simbiosis delincuencia-policía aún sigue al día de hoy. ¿Pero por qué es cuestión de enfoque?
Bueno muy sencillo. Y es que habría que contestar una sola pregunta. ¿Quién detuvo a los malos policías? Que no fueron otros buenos policías comprometidos con su deber de servir a la sociedad quien los detuvo y los presentó ante la Agencia del Ministerio Público.
Que no fueron buenos Agentes del Ministerio Público quienes integraron la carpeta de investigación para imputar delitos a los malos policías y lograr vincularlos a proceso ante un juez.
En pocas palabras; ¿Hay malos policías? Si sí hay malos policías, pero también hay buenos policías que sí le sirven a la sociedad.
3.-Esto lleva a hacer otra pregunta. ¿En el pasado reciente de Sinaloa se vio a los policías buenos detener y entregar a malos policías para iniciarles procesos penales? ¿Quién dominaba las policías? ¿Los buenos policías o los malos policías?
El hecho de que hoy los buenos policías tengan el control administrativo y operativo de las policías o cuerpos de seguridad, permite precisamente ver eso, la caída y captura de malos policías cuando estos se equivocan y son sorprendidos.
4.-Pero la hiedra venenosa da para más en estos días y el desgano pudiera aparecer en la sociedad sinaloense. Que un Agente del Ministerio Público del Fuero Común fue detenido por allá en Sonora con un cargamento de droga de más de 40 kilos de metanfetaminas.
Desde luego es evidente de que aún hay malos elementos en las agencias del Ministerio Público de la FGE. ¿Pero porque ahora hacen sus jales afuera y no adentro de la institución? Digo es pregunta.
5.-Pero otra vez la misma pregunta. ¿Quién detuvo al AMP de Sinaloa? Que no fueron buenos policías o miembros de cuerpos de seguridad como lo es El Ejército. Qué no fueron Agentes del Ministerio Público de Sonora a quienes no les importó que este personaje “charoleara” con su cargo en Sinaloa y le inició la integración de una carpeta de investigación.
¿Acaso se le protegió o protege desde las esferas de seguridad en Sinaloa a este mal AMP? Si así fuera, estaríamos mal entonces, pero si no, la mala actuación de un mal Agente no debe manchar la imagen de los buenos Agentes y mucho menos provocar desánimo social.
La ley de la balanza es la que cuenta. Cuando los positivos o los buenos en este caso son los más y sobresalen sobre los negativos, en este caso los malos, eso es lo que cuenta y eso es lo que hay que ver. Bueno, al final, insistimos, todo es cuestión de enfoque.
6.-Pero estos casos que manchan a las corporaciones no son los únicos, pero tampoco la actuación de los buenos policías tampoco.
Lo importante es ver quien domina y quien dirige actualmente los cuerpos de seguridad para saber si hay esperanza o no de tener una mejor seguridad para los sinaloenses. ¿Los buenos o los malos?
Ahí está el caso también de los agentes de la Policía Estatal que se vieron inmersos en el crimen de tres jóvenes en Sanalona. ¿Quiénes los agarraron? ¿Qué no fueron buenos policías quienes los entregaron a buenos Agentes del Ministerio Público quienes les integraron carpetas de investigación para llevarlos ante un juez y este los condenara por los delitos cometidos?
7.-Con este escenario se viene la pretensión del Gobierno Federal de desaparecer o reducir drásticamente el Fortaseg, que es el programa que dota de recursos económicos a las policías municipales y estatales. ¿Qué sería de los municipios y de los estados sin sus policías? ¿Quién ofrecería las labores de seguridad a la sociedad? ¿El Ejército, la Guardia Nacional?
8.-En Sinaloa por tres años consecutivos el mismo SNSP y organismos internacionales han ponderado la baja en la incidencia delictiva.
Hay menos feminicidios y más castigos para quienes cometen este tipo de delitos. Hay menos, pero mucho menos homicidios si se compara con el sexenio anterior. Hay menos secuestros, menos robos de vehículos, entre otros delitos que van a la baja según estos organismos.
¿Qué hay la comisión de delitos y se ven malas actuaciones de Agentes? Efectivamente se ven y esas nunca se acabarán. Esa es conducta humana.
Lo que importa es ver si hay voluntad de quienes dirigen en estos momentos las instituciones de seguridad como son el comandante Castañeda en la Secretaría de Seguridad Pública, Renato Ocampo en la Sistema Estatal de Seguridad Pública, Juan José Ríos Estavillo en la FGE, Enrique Inzunza en el Poder Judicial, el comandante Almanza en la Policía Ministerial y sobre todo, del Gobernador para coordinar los esfuerzos de los buenos policías y de los buenos agentes del MP.
Los jueces, ya son parte de otro poder y esa voluntad es mérito de Enrique Inzunza.
En fin, en temas de seguridad nada es perfecto y todo es cuestión de enfoque y depende con que se compare.
Lo que sí, es que sería lamentable aniquilar a las policías municipales y estatales al dejarlas sin recursos por parte de la Federación cuando lo que procede es limpiarla de los malos elementos como pareciera estar sucediendo, directa o indirectamente.
En fin.
Habrá que estar pendientes.
PASO A PASITO.-Les adelanto parte de una entrevista que hicimos al presidente del CDE del PAN en Sinaloa, Juan Carlos Estrada. Luego la compartimos completa. Vale la pena su lectura y sus lecturas que deja el líder panista.
Solo les diremos que el PAN anda en busca “del Tapado”. Esa es su condición para ir a una gran alianza. No quiere ni un príista de hueso colorado, ni un panista de sangre azul. Quieren un candidato ciudadano. ¿Quién? Aun lo buscan, está “tapado”.
OTRO PASITO.-El discurso y postura de Jesús Valdés empieza a subir de tono. Ya se ve ahora si como dirigente de un partido de oposición y eso quieren los priístas y mucha gente también.
Jesús Valdés lamentó la actuación de los diputados federales de Morena quienes avalaron con sus votos la desaparición de los fideicomisos o fondos del Gobierno Federal que estaban destinados a atender necesidades de la población.
El senador Mario Zamora fue otro de los políticos sinaloenses que condenó esta decisión de los diputados federales de Morena.
Y ni modo son tiempos electorales y de sentar postura de qué lado están. De la Gente o del Presidente.
UN PASITO MAS.-En la elección del dirigente nacional de Morena no se esperan sorpresas. La tercia de supremos aspirantes finalistas sin lugar a dudas estará conformaba por Porfirio Múñoz Ledo, Mario Delgado y Yeidkol Polevnsky.
¿A quién le van?
