Altoparlante Juan Manuel Partida Muy indignada salió la presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estad...
Altoparlante
Juan Manuel Partida
Muy indignada salió la presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, diputada Graciela Domínguez Nava, a refutar por “falsos” los señalamientos hechos por el coordinador de los legisladores priístas, Sergio Jacobo Gutiérrez.
Volvió a presumir honestidad y transparencia absoluta la jefa de los parlamentarios morenistas que reiterada y públicamente ha sido señalada incluso por sus propios compañeros de partido por el opaco manejo de muchos millones de pesos a su disposición, tanto en lo que se corresponde con lo institucional como por las partidas especiales como fracción.
Que no se engañe al pueblo, dijo Gracielita, con el sangrerío bucal a todo lo que da.
Ignoro si Domínguez Nava y demás compinches de verdad no se dan cuenta o no les queda más que patalear y fingir ante el hecho de que el pueblo los ubica cada vez más como lo que realmente son, falsarios que todos los días nos mienten, nos roban y nos traicionan.
Hay que concederles en un punto que les sobra razón, porque ya demostraron que no son iguales que los del PRIAN: son mucho peores.
¿Y por qué tanta rabia de la morenista ante los dichos del diputado priísta?
Pues por la nueva balconeada a esa doble moral de la cuarta transformación, con una cámara local que en eso de las cacareadas austeridad, transparencia y rendición de cuentas ha sido durante más de año y medio candil de la calle y oscuridad de la casa.
Recordemos las acusaciones directas de legisladores morenistas sobre el manejo discrecional de muchos millones de pesos por parte de quienes controlan el poder legislativo, en hechos que exhiben la burda y demagógica retórica en el supuesto de que las cosas se hacen muy bien y que todo mundo debe estar feliz, feliz, feliz.
Ninguna transparencia ni honestidad existe en decir simplemente que se gastaron esos dineros, sin presentar sobre esos egresos los respectivos documentos comprobatorios.
En esta columna comentamos anteriormente lo relacionado con la necedad de construir un nuevo edificio de oficinas legislativas, hoy a todas luces menos necesario que nunca.
Esa reiterada cantaleta de primero el pueblo tiene sus asegunes; saben muy bien que ninguna prioridad existe, pero traficar influencias sigue siendo un redituable negocio.
En lugar de indignarse, Graciela Domínguez debe explicarnos con absoluta precisión cómo es que ha manejado todos esa lana a su disposición.
Pero con papelitos, señora; porque de pura lengua nomás no sirve de nada.
¿QUIEREN QUE LA GENTE DELINCA?
Por más que nos digan que supuestamente comenzamos a ver la luz al final del túnel, la realidad muy evidente es que veremos los momentos más difíciles de la pandemia.
Urge por ello la rectificación del gobierno federal y el incremento de los esfuerzos por parte de los gobernadores para apoyar a los millones de mexicanos en apuros.
Respaldar a los empresarios y desempleados no solamente con créditos, sino con dinero en directo y “a fondo perdido” para poder salvar los negocios y alimentar a las familias.
Son dineros del pueblo, por más que se les olvide.
Operar mecanismos planteados por diversos sectores, como el diferimiento en el cobro de servicios públicos y de los descuentos que se les hacen, por ejemplo, a trabajadores de la educación.
Numerosas familias padecen hambre por la ausencia de los complementos que les representaban un trabajo adicional; y más, los que con una sola ocupación ahora quedaron sin ingresos.