Escuinapa. Pocos son los lugares con que los escuinapenses cuentan para convivir con su familia, y los que hay, como parques y plazuelas, e...
Escuinapa. Pocos son los lugares con que los escuinapenses cuentan para convivir con su familia, y los que hay, como parques y plazuelas, están en el olvido. En el peor de los casos, sin columpios, resbaladillas quebradas, lodo por la temporada de lluvias, grafiteados por vándalos, bancas destrozadas, y desolación, es lo que impera en estos días que deberían de estar llenos de familias conviviendo.
En la cabecera se cuenta con alrededor de cuatro parques en las colonias, además de la plazuela Corona y parque Hidalgo en el centro. Este último en rehabilitación, pero son los parques de las colonias los más olvidados.
Plazuela de Pueblo Nuevo. Utilizado como punto de ubicación para esa colonia, así como punto de encuentro para diferentes reuniones, fue inaugurada en agosto de 1990, no se puede saber qué fecha porque la placa donde está la inscripción está quebrada, pero está por cumplir 20 años, los vecinos dicen que desde hace seis años. Otros hablan de 14 años del último mantenimiento brindado a la plazuela, aunque ahí se construyó un edificio que alberga biblioteca y centro de cómputo por parte del Ayuntamiento, el cual está a un costado de la plazuela imponente, haciendo ver más deteriorada la misma.
Plazuela El Tamarindo. A los vecinos ya se les olvidó si esta plazuela tenía algún nombre, sólo la conocen como "El Tamarindo", es la más deteriorada, se puede observar llena de gratifis, bancas quebradas, una cisterna de concreto sin tapa, la cual representa un peligro constante para quien pase por ella de noche. Fue inaugurada entre 1993 y 1995 en el periodo del presidente Jaime Páez Miramontes, no recuerdan sus vecinos con exactitud la fecha, pero sí que el último mantenimiento se le dio hace aproximadamente seis años.
Parque El Malecón e Infonavit Arroyo. Ambos construidos en la administración de Mahoma Sánchez (administración pasada), se encuentran totalmente olvidados, no se les ha brindado mantenimiento alguno desde su inauguración, dicen los vecinos. Las bardas despintadas, y los juegos para los pequeñines prácticamente están inservibles.
Fallas. El presidente municipal Sergio Crespo ha pregonado que su gobierno rescata los valores con la finalidad de alejar a los jóvenes de actividades ilícitas para evitar sucesos como los acontecidos hace menos de una semana.
El problema es que no se ha hecho el esfuerzo para brindar lugares adecuados para una verdadera convivencia familiar.
En la cabecera se cuenta con alrededor de cuatro parques en las colonias, además de la plazuela Corona y parque Hidalgo en el centro. Este último en rehabilitación, pero son los parques de las colonias los más olvidados.
Plazuela de Pueblo Nuevo. Utilizado como punto de ubicación para esa colonia, así como punto de encuentro para diferentes reuniones, fue inaugurada en agosto de 1990, no se puede saber qué fecha porque la placa donde está la inscripción está quebrada, pero está por cumplir 20 años, los vecinos dicen que desde hace seis años. Otros hablan de 14 años del último mantenimiento brindado a la plazuela, aunque ahí se construyó un edificio que alberga biblioteca y centro de cómputo por parte del Ayuntamiento, el cual está a un costado de la plazuela imponente, haciendo ver más deteriorada la misma.
Plazuela El Tamarindo. A los vecinos ya se les olvidó si esta plazuela tenía algún nombre, sólo la conocen como "El Tamarindo", es la más deteriorada, se puede observar llena de gratifis, bancas quebradas, una cisterna de concreto sin tapa, la cual representa un peligro constante para quien pase por ella de noche. Fue inaugurada entre 1993 y 1995 en el periodo del presidente Jaime Páez Miramontes, no recuerdan sus vecinos con exactitud la fecha, pero sí que el último mantenimiento se le dio hace aproximadamente seis años.
Parque El Malecón e Infonavit Arroyo. Ambos construidos en la administración de Mahoma Sánchez (administración pasada), se encuentran totalmente olvidados, no se les ha brindado mantenimiento alguno desde su inauguración, dicen los vecinos. Las bardas despintadas, y los juegos para los pequeñines prácticamente están inservibles.
Fallas. El presidente municipal Sergio Crespo ha pregonado que su gobierno rescata los valores con la finalidad de alejar a los jóvenes de actividades ilícitas para evitar sucesos como los acontecidos hace menos de una semana.
El problema es que no se ha hecho el esfuerzo para brindar lugares adecuados para una verdadera convivencia familiar.