Altoparlante Juan Manuel Partida Valdez Se descubre que el dizque muy honrado gobierno de AMLO “compró” treinta y cinco millones de vacunas ...
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Se descubre que el dizque muy honrado gobierno de AMLO “compró” treinta y cinco millones de vacunas con cuando menos una empresa fantasma, y lo que debería ser un escándalo mayúsculo terminará negando lo rateros que son, con la clásica lloradera y los atoles desde palacio nacional.
Las reservas informativas sobre los contratos con farmacéuticas para las vacunas contra el covid se dieron con los tres laboratorios AstraZeneca, Pfizer/BioNTech y Cansino Biologics, pero hubo un contrato a todas luces irregular con una empresa suiza inexistente.
A nombre del gobierno, el canciller Marcelo Ebrard había presumido pomposamente la firma del contrato con fecha 9 de diciembre del año pasado, con el pequeño pero importante detalle de que la empresa Latham Pharma Innovative Ventures ni siquiera había sido creada.
Aunque la empresa es “suiza”, aparecen como socios dos mexicanos, un empresario farmacéutico y un abogado que seis meses antes había sido multado por nuestro gobierno por su participación en un esquema de simulación de competencia entre empresas de distribución farmacéutica.
No es éste solamente un asunto de corrupción, sino también de salud pública.
Comprar a revendedores, o fingir que se compra para robarse el dinero.
¿CUÁNTAS RAYAS MÁS?
Pregunta obligada es la de cuánto tiempo más tendremos que soportar al experto engaña tarados que sigue necio en destruir al país.
Ya hemos dicho que la oposición partidista ha carecido de valor, y en esta pasada elección pasamos de ver a un PRI simulador y cobarde a otro completamente de rodillas ante la cuarta transformación.
Nunca terminaríamos de referir las incontables desvergüenzas de un gobierno que todos los días nos miente, nos roba, nos traiciona y nos mata, y nada puede explicar con sensatez la irresponsabilidad de millones de mexicanos que todo le aplauden y justifican a los “nuevos” corruptos.
Como si no tuviéramos suficiente, el genocida Lopitos reparte en estos días su acostumbrado atole criminal con la infamia de que en México ya no hay masacres, a pesar de las muchas decenas de inocentes que siguen siendo asesinados en el mismo lugar y el mismo momento.
No tiene llenadera el atolero, que hace pocos días salió con la mafufada de que durante el proceso electoral la delincuencia organizada “se portó bien” con “solamente” 102 asesinados, además de los muchos amenazados, secuestrados y golpeados.
Agreguemos un twitt presidencial que como chiste se cuenta solo: “tomé la decisión de sustituir a Irma Eréndira Sandoval Ballesteros por Roberto Salcedo Aquino en el cargo de secretario de la Función Pública. Se continuará con la política de cero corrupción y cero impunidad. Nunca le fallaremos al pueblo”.
Como si no supiéramos que doña Irma Eréndira fue cómplice de numerosas corrupciones de la familia presidencial y de los altos mandos de la cuarta transformación.
Solapó descaradamente las transas, por instrucciones directas del presidente.
En realidad, este cese tiene que ver con el amor incondicional de Andrés Manuel hacia su querido violador Félix Salgado Macedonio; el farsante se vengó así luego de que doña Irma intentara convertir a su hermano Pablo Amílcar en el candidato y potencial gobernador de Guerrero.
El mata niños seguirá con sus corrupciones y sus engaños criminales, hasta que contemos con un pueblo más consciente y mejor organizado para enfrentar tantas tragedias.
Complicadísimo lograrlo pues, como comentamos líneas arriba, uno de los principales partidos políticos de “oposición” prefirió también traicionar al pueblo de México.