Transición Oswaldo Villaseñor ¿Y el Covid y los muertos por la pandemia? Pareciera tema olvidado que ya no existe, pero solo en el presiden...
Oswaldo Villaseñor
¿Y el Covid y los muertos por la pandemia? Pareciera tema olvidado que ya no existe, pero solo en el presidente de la república. Ese tema es en efecto la mayor vulnerabilidad junto a la crisis económica para un presidente López Obrador que intenta con golpes mediáticos espectaculares ganar un día a la vez y ganar tiempo antes de que su gobierno se derrumbe.
Atacar a sus enemigos e ir por ellos, aunque sea sólo mediáticamente, pareciera más una reacción que una estrategia de fondo para gobernar este país y combatir en realidad la corrupción.
El presidente pareciera aplicar la máxima de que percepción es igual a realidad, aunque con ello, busque negar la misma realidad que ahí está y sufren millones de mexicanos.
La salida pública del Fiscal General Alejandro Gertz Manero a difundir el contenido de las acusaciones que hace Emilio Lozoya en contra de Enrique Peña Nieto y Luis Videgaray, va en contra toda la lógica jurídica, pero si va alineada a una lógica política.
De entrada, difundir el contenido de una demanda penal, va contra el principio más defendido por las mismas autoridades cuando no quieren que algo se sepa. No se puede violar el debido proceso.
¿Y aquí no violó el debido proceso el Fiscal al informar los detalles de la denuncia cuando ni siquiera ha iniciado la carpeta de investigación ni ha investigado-según sus palabras- la veracidad de las acusaciones para poder soportarlas de manera legal?
La única explicación, para entender la salida del Fiscal General, es que no cabe duda de que el Presidente Andrés Manuel está dispuesto a jugarse el todo por el todo antes de aceptar perder la mayoría legislativa el próximo año. Lo hemos dicho en reiteradas ocasiones. Ese es el único miedo que tiene el presidente.
La falta de resultados en los principales rubros en los cuales basó su exitosa campaña, lo tiene contra la pared. Prometió hacer crecer la economía hasta el 6 por ciento. La realidad dice que andará al cierre del presente año en números negativos, en -10 por ciento.
Prometió acabar con la inseguridad y pacificar el país y la realidad dice que el tiempo que lleva de gobierno, se ha convertido en el tiempo más violento de la historia para esta nación. Casi 60 mil asesinatos violentos en menos de dos años.
Prometió combatir y acabar con la corrupción, barrer las escaleras de arriba abajo y la realidad dice que más del 80 por ciento de los contratos asignados por el gobierno se hacen sin licitar, lo cual aquí en china se llama corrupción. Eso no lo ve el presidente, pero ahí están.
Pero lo más lamentable es que el presidente que prometió combatir la corrupción, en casi dos años de gobierno, no haya hecho nada para cerrarle el paso a la corrupción propia, sino que tampoco ha hecho gran cosa para combatir la corrupción del pasado.
Más allá de los escándalos mediáticos, los señalamientos de culpas, la verdad es que no hay políticos corruptos en la cárcel. Emilio Lozoya, el pez más gordo mostrado por el Gobierno de Andrés Manuel en su “lucha contra la corrupción”, hasta hace lujosa fiesta en su casa para festejar su libertad. ¿Pues cómo está eso pues?
La exhibición del fracaso de la lucha contra la corrupción y la exhibición de las complicidades no puede ser más grande. La burla para el pueblo es mayúscula.
Sin embargo, tan burdo es el rumbo que ha tomado la lucha del combate a la corrupción y la judicialización de la política, así como la politización de la justicia, que ahora resulta, que el acusado por el gobierno federal como el corrupto mayor, ahora se presenta como “el sapo” que acusa a otros de los delitos que a él se le imputó cometió.
Pero lo más lamentable es ver como hasta el Fiscal General de la República, se presta al espectáculo montado y sale a anunciar los señalamientos que hace Emilio Lozoya y de paso diga que nada de esto lo tenga comprobado aun.
Es decir que apenas iniciarán las carpetas de investigación para ver si los dichos de Lozoya son ciertos. ¿Entonces porque lo anuncia con bombo y platillo?
Bueno porque al final, ese pareciera ser el objetivo. Judicializar la política, doblegar a los enemigos políticos del presidente, para luego armar el circo con la politización de la justicia y al final nada pasó. Solo la exhibición pública.
Veamos porque.
1.-El Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero salió públicamente a dar a conocer los dichos de Emilio Lozoya expuestos supuestamente en una denuncia de hechos en los cuales señala al ex presidente de México y ex secretario de Hacienda durante la anterior administración. Nunca los señaló por su nombre pero evidentemente se trata de Enrique Peña Nieto y de Luis Videgaray.
2.-¿Qué acusa el acusado Emilio Lozoya? Bueno que el recibió por instrucciones de Peña y Videgaray de parte de la empresa Odebrecht, más de 100 millones de pesos que fueron destinados a la campaña política del 2012 del ahora expresidente de México.
¿Pero que no de acuerdo a un juez federal que le otorgó un amparo a Emilio Lozoya y ordenó hasta cancelar la orden de aprehensión girada en su contra por estos delitos; ya prescribieron?
Y si ya prescribieron estos supuesto delitos cometidos por estos ex funcionarios, entonces porque el interés del gobierno federal de seguir difundiendo su evidencia de supuesta corrupción. Muy sencillo, al presidente no le interesa meter a ninguno de estos políticos a la cárcel, pero si le interesa exhibirlos y mantener políticamente vivo hasta el 2021, el tema que le dio la presidencia en el 2018.
3.-¡Ah!.. pero de acuerdo a lo dicho por el Fiscal y que se desprende del dicho del acusado y ahora perdonado por el Gobierno de Andrés Manuel, o sea Emilio Lozoya, también se habló de sobornos a diputados y senadores para la aprobación de la reforma energética.
¿Meterá a la cárcel a los cientos de diputados que aprobaron la reforma energética? Está más claro que no podrá y menos por estas acusaciones hechas por el primeramente inculpado Emilio Lozoya. Nada de esto que exhibe el fiscal y el presidente tendrán trascendencia legal, pero si política y mucha.
4.-En fin, el presidente anda desesperado y le urge mantener vigente el tema del combate a la corrupción. La pandemia, los muertos y la crisis económica amenazan con ahogar su gobierno. ¿Le alcanzará la pura percepción de que combate la corrupción y al final no haya los resultados esperados por la gente?.
Esa sigue siendo la pregunta del millón. Todo lo demás es puro circo mediático. A la gente pan y circo reza la máxima, aunque en México habrá puro circo sin pan.
5.-En el mejor de los casos, de lograr una condena en contra de Peña y de Videgaray, los delitos por los cuales se les acusa, en la ley, no son considerados como delitos graves, así que tampoco pisarán la cárcel. ¿Eso lo sabe el presidente?
Claro que lo sabe y en más de una ocasión ha dicho que él no comparte la opinión de mucha gente de que quiere ver políticos corruptos en la cárcel aunque sea un año, sino que a él lo que interesa es moralizar al país. Es decir solo exhibir a los políticos corruptos. Ah eso sí, solo a sus opositores, por lo que se ve.
6.-Lo cierto, es que el presidente va con todo en contra de panistas y priistas para poder conservar la mayoría del Congreso el próximo año. La pregunta es. ¿Doblegará el presidente a los priistas sobre todo para que sean sus paleros o lo enfrentarán en una gran alianza de todos contra él?
Si los priistas se doblan, el presidente mantendrá y fortalecerá su poder sin necesidad de meter corruptos a la cárcel, cuando menos, no los tiburones de la corrupción, pero si lo enfrentan, el riesgo para el presidente será mayúsculo.
¿Y a la gente del pueblo inconforme con el presidente como los frenará? Con el único antídoto que existe, que es infundir miedo y para eso parecieran ya estar listos los cárteles de la droga o delincuencia para hacerle ese trabajo al Presidente. Ufff.
Habrá que estar pendientes.
PASO A PASITO.-Carlos Gandarilla no solo fue calificado como un diamante en bruto en un diagnóstico preelectoral que se difundió días atrás, si no que si trae aspiraciones claras de convertirse en candidato por el PRI a la gubernatura de Sinaloa.
Su campaña de un Sinaloa sin plásticos se ha convertido en su principal bandera para acercarse a la gente y mostrar resultados tangibles de lo mucho que se puede hacer por el medio ambiente y la salud del pueblo. En estos días de pandemia, este trabajo, efectivamente si puede ser un diamante en bruto.
La pregunta es. ¿Le alcanzará a Carlos Gandarilla?
Por lo pronto ya se mueve y ya trae la mano levantada de que sí quiere. ¿Es una de las cartas del gobernador?. Permiso de su jefe sí trae, eso es evidente. Veremos para que le alcanza.
OTRO PASITO.-¿Le meterán miedo a la gente? Nomás hay ver dos hechos sucedidos ayer. Por un lado asesinan en su casa al padre del otrora poderoso ex Subsecretario de Gobernación Luis Enrique Miranda,- uno de los hombres más cercanos a Peña- y por otro, aparece en redes sociales un nuevo cartel de la droga lanzando amenazas.
¿Cómo calificaron algunos medios estos dos hechos? Así de sencillo. “Delincuencia siembra terror en la gente en México”.
UN PASITO MAS.-¡Apúntele!.. Un Juez Federal con sede en Mazatlán le otorgó un amparo a Armando Villarreal y a su gente en contra del auto de vinculación a proceso y ordenó que se haga una nueva imputación por parte de la Fiscalía General a petición desde luego, de la parte ofendida, en este caso Gobierno del Estado.
O sea que el caso regresa al principio. La pregunta obligada. ¿Será el mismo guion escrito en su primer principio o será reeditado el guion para el siguiente principio? ¿Aquí pudiera acabar la historia y cerrarse el caso? Esas respuestas pueden llegar en el pronto tiempo.
Ya veremos dijo el ciego.