Concordia, Sinaloa El Gobierno Municipal de Concordia encabezado por el alcalde Alfredo Vizcarra Díaz, a través de la Dirección de Desarr...
Concordia, Sinaloa El
Gobierno Municipal de Concordia encabezado por el alcalde Alfredo Vizcarra
Díaz, a través de la Dirección de Desarrollo Rural Sustentable, destinó 40 mil
crías de mojarra tilapia a pescadores de la Comunidad de Canutillos que, a su
vez, fueron gestionadas ante el Instituto Sinaloense de Acuacultura y Pesca -ISAPESCA-,
dirigido por César Julio Saucedo Barrón.
Impulsar
el desarrollo de las poblaciones del área rural con proyectos sustentables y programas
en pesca, así como la vinculación de esta con otros sectores productivos de la
región, son objetivos registrados en el Plan Municipal de Desarrollo, por lo
cual, se fijó como una de las metas repoblar la “Laguna del Sapo”, ubicada en
la Sindicatura de Zavala, correspondiente a la Comunidad de Canutillos, expresó
Leocadio Brito Loaiza, Director de Desarrollo Rural Sustentable en Concordia.
Por
medio de un estanque de traslado con oxígeno y dispositivos para aireo, los
alevines fueron transportados por personal de Desarrollo Rural, desde el
laboratorio y criaderos de El Varejonal, Badiraguato, hasta el cuerpo de agua
local. Previamente, se analizaron las características para determinar su
factibilidad, resultando un depósito natural que cumple con la profundidad
requerida, para que cuente con espacio y oxígeno para 40 millares de crías.
El
funcionario, acompañado por el Secretario del Ayuntamiento Alberto Zatarain
Chávez, manifestó que el periodo de crecimiento de los peces será de cinco
meses; posteriormente podrá capturarse sólo para consumo de las familias,
adelantando que esta actividad será vigilada y protegida por miembros de la
comunidad vecina.
Por
otra parte, Zatarain Chávez, a nombre del Alcalde Vizcarra Díaz, agradeció a
ISAPESCA y al Secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan Nicasio Guerra
Ochoa, por el apoyo y las facilidades otorgadas durante el proceso de esta
gestión, para beneficio de los concordenses; al mismo tiempo, invitó a la
población a respetar el tiempo de crecimiento de los alevines hasta alcanzar, a
fin de año, los 300 gramos de peso como sugerencia en la pesca para consumo
humano.