Cerca de 100 mil desapariciones en México motivan acciones afirmativas del Colectivo 50+1 y Rastreadoras de Sinaloa, Coahuila y Nuevo León, ...
Culiacán, Sinaloa.- Con el objetivo de unir esfuerzos el Colectivo 50+1 a través de la Comisión Nacional de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia realiza encuentro con Mujeres Rastreadoras, mayoritariamente mujeres, que realizan la búsqueda de sus familiares desaparecidos en México.
La Presidenta Nacional Maria Elena Orantes en su mensaje hizo hincapié en los elevados índices de violencia y ahora también de desapariciones, siendo una de las problemáticas más sentidas en México, así como de la necesidad de hacer sinergia diversas asociaciones civiles para hacer justicia y cerrarle el paso a la impunidad. Las Rastreadoras son un ejemplo para las instituciones responsables de nuestra seguridad dijo.
Por su parte Diva Gastelum, Presidenta de la Comisión Nacional de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, fue enfática al señalar que exponer los casos de las Rastreadoras, nos ubican en el clima de violencia actual. Reconoció la capacidad de todas estas mujeres y familias, que hicieron trascender su activismo personal, convertido hoy en asociaciones profesionalizadas, siendo esperanza para familias y la sociedad entera.
Estuvo presente Erika Sánchez, Presidenta del Colectivo 50+1 Capítulo Sinaloa, celebró el esfuerzo del colectivo nacional al visibilizar las desapariciones, y poner los medios al unir esfuerzos con otras organizaciones de sociedad civil, que coadyuven en la eficacia de las instituciones.
En el Foro participó Leticia Hidalgo de una Fundación de Nuevo León (FUNDENL), expuso su peregrinaje de búsqueda, que inició desapareció su hijo en 2011, secuestrado por un grupo armado, a 11 años concluye que las instituciones no responden a la tragedia humanitaria que se vive en cada entidad federativa donde prevalece la incompetencia e indolencia; exige impulsar instituciones, mecanismos y funcionarios capacitados para atender estos casos
Silvia Elida Ortiz Rastreadora de Coahuila, realiza trabajos de búsqueda desde 2004 año en que desapareció su hija 2004, fundadora del Grupo Vida AC, ha impulsado la marcha del 10 de mayo donde participan cientos de familias cada año para motivar la búsqueda de personas. Señaló la importancia de capacitación a grupos de búsqueda y colectivos para conocer de las instituciones, mecanismos y herramientas para reconocer restos humanos, asì como de reconocimiento en lo han determinado campos de exterminio (fábricas de la muerte), pues se han encontrado en una sola zona mas de 100 personas. Exigen personal de campo, forense, presupuesto suficiente para estudios de laboratorio, encontrar es apenas el primer paso, reconocer hasta el momento puede llevar años.
La sinaloense Mirna Medina, que encabeza el Grupo de Rastreadoras de El Fuerte, empezó en 2014 tras la desaparición de su hijo Roberto Corrales, comentó sobre la falta atencion y reconocimiento de las desapariciones, y que, a pesar de ya contar con una Ley de Desaparición forzada, así como una Ley General de Victimas, aún falta mucho por hacer. Comento sobre la especial atención que se le debe poner a la población de entre 15 y 35 años, segmento de edad con mayor índice de este delito.
Unir el conocimiento es una tarea diaria de 50+1, esta vez por sociedad cada vez más informada del contexto de las desapariciones y por la exigencia de áreas especializadas en identificación forense, que den celeridad al reconocimiento de estos tesoros de miles de familias. Vamos por la detención de este flagelo, que nos ayude a encontrar victimas con vida.
Las de hoy fueron historias de dolor, pero que han motivado encontrar a sus familiares y a muchas personas desaparecidas más.