Varios países comenzaron ya con las celebraciones por la llegada de 2019, desde las islas de Oceanía hasta Japón y China Como todos los...
Varios países comenzaron ya con las celebraciones por la llegada de 2019, desde las islas de Oceanía hasta Japón y China
Como todos los años, Fiyi, Australia y Nueva Zelanda se adelantaron al resto del mundo y comenzaron las celebraciones por la llegada de 2019. En el caso del gigante de Oceanía, con el mayor despliegue de fuegos artificiales en la historia de Sidney.
Kiribati fue el primer país en recibir al 2019. En su caso, con celebraciones modestas ante la creciente preocupación de que el país termine desapareciendo ante el impacto del cambio climático.
Mientras tanto, en Nueva Zelanda, decenas de miles de personas se reunieron en torno a la Sky Tower para disfrutar del espectáculo pirotécnico, el cual inicia en lo alto del edificio, de 328 metros de alto.
Pos su parte, Australia desplegó su fastuoso espectáculo de año nuevo en Sidney en medio de una tormenta eléctrica, la cual no impidió que un millón de personas salieran a las calles para ver los más de 100 mil efectos pirotécnicos utilizados, los cuales fueron acompañados por los rayos.
En punto de la media noche, resonó en la bahía la canción “(You Make Me Feel Like) A Natural Woman”, uno de los temas más conocidos de Aretha Franklin, conocida como la “Reina del Soul” y quien falleció en el mes de agosto.
En China, la celebración estuvo limitada principalmente a las grandes ciudades, tomando en cuenta que como en gran parte de Asia se rigen principalmente por el año lunar chino, sin embargo, se espera la presencia de 300 mil personas para ver el espectáculo pirotécnico en el Puerto Victoria.
Por su parte, en Tailandia, además de los fuegos artificiales en Bangkok, muchas personas acudieron al templo Takien, donde siguiendo la tradición budista se acostaron al interior de ataúdes para deshacerse de la mala suerte y nacer otra vez en año nuevo.
Los participantes sostienen flores e incienso mientras los monjes los cubren de sábanas rosas y cantan oraciones usualmente dedicadas a los muertos.
En Tokio, la multitud acudirá a los templos mientras los fuegos artificiales iluminan la ciudad para hacer sonar los tambores ante la llegada del año nuevo y pedir a los dioses que les traigan buena fortuna.
