No se debe perpetuar la injusticia y la desigualdad, señaló la vicepresidenta de la Fundación Ayú y secretaria de Acción Indígena ...
- No se debe perpetuar la injusticia y la desigualdad, señaló la vicepresidenta de la Fundación Ayú y secretaria de Acción Indígena del CEN del PRI, durante la presentación del libro "Lucha contra la pobreza en la nación mixteca"
La vicepresidenta de la Fundación Ayú, Narcedalia Ramírez Pineda, afirmó que la pobreza "no puede ser una historia de nunca acabar", sobre todo en la zona mixteca.
Durante la presentación del libro "Lucha contra la pobreza en la nación mixteca", la también secretaria de Acción Indígena del CEN del PRI, enfatizó que en esa zona se requieren acciones encaminadas a generar empleos y orientadas a una audaz redistribución del ingreso.
La vicepresidenta de la Fundación Ayú indicó que una estrategia de éstas características coadyuva a detener el crecimiento del número de pobres, tal como ha ocurrido en la región que comprende los estados de Puebla, Guerrero y Oaxaca, donde incluso la Comisión Económica para América Latina y El Caribe (CEPAL) destacó el "gran esfuerzo compartido con los pueblos más pobres y olvidados".
En el Salón de Actos de la Fundación Ayú, indicó que la organización que encabeza implementó una serie de proyectos para apoyar a las familias de una de las zonas geográficas más marginadas del país, a fin de promover su mejora.
En un video proyectado durante la presentación del libro se detallan las acciones que la Fundación Ayú impulsa, como el desarrollo productivo a través de talleres de pintura, manejo de telares, repostería y cultivo de setas, principalmente para las mujeres, quienes además han adquirido una "conciencia de liderazgo y su valor humano" que rompe el esquema de la cultura machista.
Además, en el audiovisual, se mostraron otros apoyos como las becas a los niños de entre cinco y 12 años para que estudien, así como dotarlos de refrigerios, útiles escolares y uniformes.
Para los adultos se dieron apoyos que fomentan microempresas de artesanías y en áreas que tienen que ver con actividades agropecuarias, principalmente.
Más adelante, Ramírez Pineda, expresó que todos los proyectos buscan despertar la creación de los mixtecos y que se acompañan de una permanente capacitación y asistencia técnica. Se han impulsado planes de reforestación, combate a la desnutrición, programas de vivienda rural y fomento a la cultura del ahorro.
Ramírez Pineda comentó que la fundación ha beneficiado a más de 50 mil personas en una zona cuyos niveles de marginación social, económica y cultural han obligan a sus habitantes a marcharse a otras entidades –principalmente a la capital del país– y a los Estados Unidos.
La secretaria de Acción Indígena expresó que "hoy más que nunca, estoy convencida que la transformación de la Mixteca tendrá que ser obra de los mixtecos, apoyados en acciones gubernamentales y la solidaridad de las organizaciones de la sociedad civil".
El acto contó con la participación del director del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, Diego Valadés; Alfonso Cebreros, director de Relaciones Gubernamentales del Grupo GRUMA; Héctor Carlos Salazar, presidente de la Comisión Nacional de Productores Agrícolas de Maíz en México; Modesto Seara-Vázquez, rector de la Universidad Tecnológica de la Mixteca y Luis de la Calle, director general de la Asociación "De la Calle, Madrazo y Mancera".
Todos coincidieron en señalar la importancia de que los indígenas adquieran conciencia de sus capacidades y potencialidades.
Enfatizaron que este tipo de apoyos –como los de la Fundación Ayú– no deben sustituir la implementación de políticas públicas serias y responsables y que se deben aprovechar las investigaciones.
