Escuinapa, Sin. 12 de agosto de 2010.- El turismo es la vocación natural del sur de Sinaloa, que se está desarrollando a pasos acelerados...
Escuinapa, Sin. 12 de agosto de 2010.- El turismo es la vocación natural del sur de Sinaloa, que se está desarrollando a pasos acelerados, aunque en ocasiones sin la planeación que debe imperar para que sea sustentable, dijo hoy aquí el titular del ramo, Francisco de la Vega Aragón, al especificar que el desarrollo del Centro Integralmente Planeado (CIP) de Teacapán representa la oportunidad de atraer más inversiones, incrementar la afluencia de visitantes y con ello, eliminar rezagos socioeconómicos y mejorar las condiciones de vida de la población del sur de Sinaloa.
Al intervenir en la Consulta Pública del CIP, organizado por Semarnat, en donde se escucharon diversas posturas relacionadas con el impacto ambiental que representa el desarrollo del CIP, el secretario de Turismo de la entidad fijó la posición del Gobierno del Estado al pronunciarse por una planeación sustentable desde el punto de vista ambiental, y una política incluyente que contemple los aspectos sociales y económicos en beneficio de la población del sur de la entidad y de Sinaloa de una manera integral.
El CIP representa la punta de lanza para el desarrollo en el sur del estado y sea éste ejemplo nacional del turismo sostenible, como lo define la Organización Mundial del Turismo y reafirmó el compromiso del Gobierno del Estado, que en coordinación con las autoridades municipales, establecerá normas y lineamientos para que se elaboren programas de sensibilización para la valoración de la biodiversidad y el aprovechamiento de los recursos naturales.
Como apoyo al CIP de Teacapán, el Gobierno de Sinaloa contempla la construcción de infraestructura para el acopio y manejo de residuos industriales, hospitalarios, agrícolas y acuícolas peligrosos, así como la formación de un organismo operador de sistemas de agua potable en los municipios de la región para integrar el tratamiento de aguas residuales, diseñar y aplicar sistemas municipales de alerta y protección civil.
En el aspecto socioeconómico, De la Vega Aragón aseguró que el megaproyecto turístico más importante del país en los últimos 25 años, contribuirá a impulsar la diversificación de la economía regional, para generar empleos en todos los sectores productivos del estado.
Habló del fomento a la integración de pequeñas y medianas empresas turísticas, del establecimiento de programas de asesoría técnica y de transferencia de tecnología para el mejoramiento del desempeño de las PYMES, así como de promover facilidades e infraestructura técnica y humana para la implementación y ampliación de programas de salud para la población.
En el renglón del desarrollo urbano, el funcionario estatal se pronunció por el establecimiento de los usos del suelo y el ordenamiento territorial de los poblados ubicados en las áreas de influencia del CIP, con el propósito de conformar un sistema que permita minimizar la presión de los asentamientos humanos y equilibrar territorialmente el equipamiento y los servicios generados por la actividad turística.
De particular importancia resulta la propuesta del Fonatur para que el CIP constituya un modelo de turismo sustentable, compatible con los procesos y componentes de los ecosistemas costeros.
El desarrollo de este proyecto, dijo en presencia de diversas organizaciones medioambientalistas, representantes del Fonatur y funcionarios de Semarnat, representa una oportunidad para ampliar el mercado de trabajo de diseñadores, constructores, proveedores de Sinaloa, así como desarrollar una infraestructura y arquitectura bioclimáticas, que integra una guía de diseño, edificación y operación de edificios con parámetros de ahorro de energía y cuidado del medio ambiente.
Por su parte, diversos grupos ambientalistas afirmaron que no se oponen al desarrollo de este proyecto turístico, siempre y cuando se cumpla con los compromisos asumidos por Fonatur, en particular en cuanto al respeto a los manglares aledaños al predio, se evite la salinización del acuífero, las lagunas costeras y cultivos adyacentes; se decreten las Marismas Nacionales como área natural protegida, se garantice el libre acceso a las playas, y se construya un relleno sanitario.
Los especialistas de Fonatur aseguraron que el proyecto cumple con todas las normas medioambientales vigentes del país, y dieron puntual respuesta a las solicitudes de los asistentes.
Al evento asistieron también Mateo Castillo, coordinador de Enalce Ciudadano de Semarnat, la delegada de la dependencia en Sinaloa, María del Carmen Torres y Juan Carlos Hurtado, delegado de Fonatur en la entidad, y representantes de diversas organizaciones medioambientalistas.