La Profeco realizó un estudio para determinar cuáles son las mejores marcas de aceite comestible del mercado La Procuraduría Federal del Con...
La Profeco realizó un estudio para determinar cuáles son las mejores marcas de aceite comestible del mercado
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó un estudio de laboratorio con el fin de conocer la calidad, ingredientes y aporte nutrimental de las marcas de aceite comestible que se ofertan en el mercado.
El estudio incluyó marcas de aceite vegetal, de olivo, canola, girasol, maíz, palma, entre muchos otros ingredientes que se ofertan en las tiendas desde precios accesibles hasta más elevados por ser denominadas marcas gourmet.
La Profeco indicó que el análisis concluyó que los aceites más saludables resultaron ser los elaborados con grasas buenas de ingredientes como el cacahuate, girasol, cártamo, maíz, olivo, canola y soya.
No obstante, la procuraduría añadió que los aceites de uva, ajonjolí y salvado de arroz también son productos saludables pero que suelen venderse a precios mucho más elevados.
Los mejores aceites comestibles, según Profeco
La lista de los mejores aceites comestibles que se venden en el mercado mexicano de acuerdo con la Procuraduría Federal del Consumidor quedó de la siguiente manera:
Aceite Vegetal Comestible
Ave, Ke! Precio, Chedraui, Precissimo y 1-2-3.
Aceite de Canola
Capullo, Capullo Procardio, Vita y Valley Foods.
Aceite de Girasol
DiCiero y 1-2-3.
Aceite de Maíz
Altea y La Gloria.
Aceite de Olivo
La Gitana, El Olivo y San Lucas.
Aceite de Palma
Biosol.
Aceite de Aguacate
Avocare, Cate de mi Corazón (en sus variedades) y San Lucas extra virgen gourmet.
Aceite de Ajonjolí
Foreway sesame expert, Hum Chum, Kaporo, JFC de ajonjolí, Satoru y san Miguel de ajonjolí extra virgen.
Aceite de Uva
San Lucas, aceite de pepita de uva.
Asimismo, la Profeco recomendó a los consumidores que al momento de comprar aceite comestible siempre revisen la etiqueta del producto para verificar que contenga menos de 4 gramos de grasa saturada por cada cucharada de producto y que no tengan aceites parcialmente hidrogenados ni ácidos grasos trans.