Altoparlante Juan Manuel Partida Valdez No se puede concebir tanta irresponsabilidad criminal por nuestros gobiernos, empeñados neciamente e...
Juan Manuel Partida Valdez
No se puede concebir tanta irresponsabilidad criminal por nuestros gobiernos, empeñados neciamente en el regreso a clases presenciales a partir del treinta de agosto.
Recordemos que el presidente mata niños se encaprichó con lo mismo el pasado siete de junio, y que una semana después se canceló la disposición absurda en las entidades que la operaron.
Hoy tenemos una tercera ola de covid con elevado número de contagios y muertes, y se anuncia un cuarto repunte precisamente para el próximo mes.
Pero ya sabemos que al falso mesías lo único que le importa es imponerle al pueblo de México sus ocurrencias y sus frivolidades, aunque nos cueste cientos o miles de vidas más.
Qué se puede esperar de un primer mandatario que cuando la pandemia comenzaba a impactar en todo el mundo tuvo posturas tremendamente increíbles como la de las estampitas, su aseveración de que bastaba ser honesto para no contagiarse y su llamado a que saliéramos de nuestras casas porque el virus ningún daño hacía.
El mismo López Obrador que hace más de un año presumió hasta el cansancio que había domado la pandemia.
Bien sabemos que el falso mesías no tiene lucha, pero tenemos que reprochar que en Sinaloa tanto el gobernador Quirino Ordaz Coppel como el rector de la UAS, Jesús Madueña Molina, se sumen sin rubor a lo que bien saben resulta una medida de enorme riesgo no sólo para los estudiantes y los maestros sino para toda la población en general.
Les preocupa más que se pueda enojar el dictador, que cuidar la salud y la vida de los sinaloenses.
EL CÍNICO BENÍTEZ
Como era de esperarse, el presidente municipal de Mazatlán recurrió a su acostumbrado cinismo para intentar lavarse las manos en torno a las “facilidades” que se han dado a algunos de los negocios instalados en las playas del puerto.
Las ampliaciones y nuevas construcciones están avaladas por el gobierno federal, y punto.
Ya con eso todo es completamente legal, según Luis Guillermo Benítez Torres.
Así funcionan las cosas con los de Morena, que con todo desparpajo se burlan de las leyes y se tiran al suelo llorando a moco tendido cuando alguien se atreve a señalarles sus raterías.
NARCO GOBIERNO
No tiene llenadera la irresponsable brutalidad del narcopresidente, terco en que funciona y sirve la “estrategia” de los abrazos y no balazos.
México está ardiendo en inseguridad y en violencia, con los cárteles haciendo lo que se les pega la gana incluso en franca burla a nuestras fuerzas armadas, pero el presidente mantiene su empeño en cumplir su pacto de no perseguir ni castigar a los capos de la delincuencia organizada.
Una que otra detención de mandos medios o de la “tropa”, sólo para simular.
El colmo, la disposición del gobierno para coordinar reuniones para que las mafias lleven la “fiesta” en paz, con la obvia protección del gobierno.