En su casa y ante su gente. En el primer duelo que Chivas abrió las puertas del Akron para el Guard1anes 2021, la afición terminó abucheando...
En su casa y ante su gente.
En el primer duelo que Chivas abrió las puertas del Akron para el Guard1anes 2021, la afición terminó abucheando a un Guadalajara que mostró apatía y los mismos errores de siempre en la goliza de 3-0 ante el América en el Clásico Nacional.
Chivas no era humillado por las Águilas desde el Clausura 2014, cuando los golearon 4-0. Ayer, no hubo argumentos futbolísticos en el planteamiento de Víctor Manuel Vucetich, porque los dirigidos por Santiago Solari cascarearon a los Rojiblancos.
La más importante de los tapatíos la generaron al minuto y medio de iniciado el partido, pero Jesús Angulo careció de técnica y solo, de frente con Guillermo Ochoa, mandó el balón a la tribuna. Fue la más clara para Chivas en todo el encuentro.
América tuvo en Álvaro Fidalgo otra similar a la de Angulo, que también la mandó a las tribunas, las cuales fueron ocupadas por poco más de 11 mil aficionados.
La táctica fija para el Rebaño es un dolor de cabeza y en la recta final del primer tiempo Henry Martin en medio de Jesús Molina y Antonio Briseño brincó para desviar la trayectoria de la pelota con la cabeza y mandarla al fondo del arco, en una mala salida de Raúl Gudiño, gol que les festejó como Cuauhtémoc Blanco para mostrar la “identidad” que el “Pollo” aseguró en la semana no tenían.
Para el complemento, Vucetich movió a su equipo. Sacó a José Juan Macías y dejó la responsabilidad a Ángel Zaldívar, quien tuvo una clara y la falló. Luego, Miguel Ponce sumó a la crisis y tras ingresar al 62’, se fue expulsado 10 minutos después por una fuerte entrada sobre Leo Suárez.
Cinco minutos más tarde, Martin cortó cuernos y cola para hacer el segundo con cabezazo seco, ante la deficiencia defensiva de Chivas, otra vez, en balón parado.
Para cerrar una noche de terror para la defensiva tapatía, Sebastián Córdova y Martin burlaron la zaga con una pared que terminó definiendo el canterano americanista para el 3-0 final con humillación incluida.