Sosoriqui Carlos Rochín Vergüenza les debería de dar a quienes quieren hacer ver que el 6 de junio pasado ganó el narco en Sinaloa, o qu...
Sosoriqui
Carlos Rochín
Vergüenza les debería de dar a quienes quieren hacer ver que el 6 de junio pasado ganó el narco en Sinaloa, o que por ese factor perdió el PRI su hegemonía perenne en el gobierno estatal.
Lo que dejan muy claro estas mentes mercenarias en la etapa post-electoral, y que, aún inmersos en los trabajos de conclusión del proceso 2020-2021; es que son ellos mismos los que a mansalva un día si, y otro también, fustigaron por todos sus medios a su alcance al presidente López Obrador y a la 4t, y quienes ahora pretenden manchar como resultado del dolor de su derrota, la elección más democrática y participativa que históricamente ha experimentado nuestra entidad.
Amigos, en ese sentido, es menester recordarles que nadie ha negado, ni tan siquiera se ha tratado de ocultar, que a propósito del calor de las elecciones constitucionales de este año, se presentaron en las diversas etapas del proceso, actos violentos deleznables y de total reproche.
Asimismo, las elecciones denominadas las más grandes de México, han sido también etiquetadas como el proceso electoral más violento, por las altas estadísticas fatales que arroja.
Lo que están olvidando nuestros paisanos, es decir que el fenómeno lacerante, sucedió en contra de las diversas plataformas políticas, alcanzando de forma muy particular a integrantes de partidos como RSP, Morena, PAS, PRI, PAN y PRD, así como proyectos englobados en la coalición “Va por Sinaloa” y algunas candidaturas comunes de Morena y PAS.
No obstante todo lo anterior, déjenme aclararles que a nadie se puede engañar en nuestros días, y que, para el caso de la gubernatura, como lo señaló recientemente el tamaulipeco y delegado del CEN de Morena en Sinaloa, Senador Américo Villarreal Anaya, «son 128 encuestas las que de arranque, daban un adelantado triunfo en favor del morenista; Rubén Rocha Moya». Y para que les salga pus: «la gran mayoría de forma aplastante».
Por otro lado de la cacha, ¿a poco los errores y descalabros que uno tras otro iban ideando las brillantes mentes que asesoraron a la coalición opositora PRI, PAN, PRD y su abanderado Mario Zamora Gastélum, creen que pasó desapercibida para la sociedad, incluso dentro de las filas de la militancia tricolor? Por su puesto que, ¡no!
Advertimos que en lo sucesivo, deberán buscar darle vuelta a la página y no querer manchar la decisión que cruzaron en boletas un 56.60 de la ciudadanía, lo que denota una muy alta participación, equivalente a 624 mil 255 votos en favor de la candidatura común Morena-PAS encabezada por Rubén Rocha Moya.
Para ustedes, explicado con peras y manzanas: 624 mil 255 votos de Rocha, contra 358 mil 313 de Zamora; enorme diferencia de casi 266 mil sufragios que sería burdo sea cuestionado a lado de los mínimos, aislados e irrisorios actos de violencia presuntamente perpetuados por los agentes del narco. ¿O si?
Más claro: el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador (Morena) en alianza con el PAS, ganaron con contundencia en Sinaloa:
-Una gubernatura.
-23 de 24 diputaciones locales.
-15 de 18 presidencias municipales.
- 7 de 7 diputaciones federales.
¿En qué lugar les queda la duda de un muy marcado hartazgo de los electores en contra del PRI y sus aliados donde Morena arrasó con todo? Esa, será su tarea.
Por último, un proceso marcado por la intromisión directa y documentada por el aparato de Gobierno del Estado donde Quirino Ordaz lleva su parte, circunstancia que también señaló el Senador Villarreal Anaya, ah, pero de eso no dicen nada…
Atentos, que muy mal parados están quedando priistas como Mario Zamora y alharaqueros del Gobierno al querer justificar su catastrófico derrumbe electoral y político con la intromisión del narco en la pasada elección.
Así nomás, para que vayan y digan.
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