Sosoriqui Carlos Rochín La señora Pier Angely Camacho Montoya es una mujer preparada académicamente para ser hoy la alcaldesa de Salvador ...
Sosoriqui
Carlos Rochín
La señora Pier Angely Camacho Montoya es una mujer preparada académicamente para ser hoy la alcaldesa de Salvador Alvarado. Y quien como todos sabemos llega en sustitución de su finado esposo, el ex alcalde Carlo Mario Ortiz Sánchez; designada de acuerdo a nuestra Constitución Política de Sinaloa por el Poder Legislativo.
La alcaldesa viuda de Ortiz fue la única propuesta del gobernador Quirino Ordaz Coppel para ocupar el cargo que dejara su esposo al fallecer a consecuencia de complicaciones de salud ocasionadas por el covid-19.
Pier Angely, es una ciudadana alvaradense con todos sus derechos constitucionales a salvo, aunado a que fue la esposa en vida de Carlo Mario Ortiz, primer alcalde en hacer historia en Salvador Alvarado por hacer válida la reelección aprobada en México y en Sinaloa de acuerdo a la nueva y última reforma política.
Llega a tan distinguido cargo, también porque la hoy mandataria municipal alvaradense en su rol de primera dama en activo y su papel como presidenta del Sistema Integral para el Desarrollo de la Familia (DIF municipal), logró un desempeño bueno, aprobatorio y destacado por el nivel de sensibilidad que comportó con las clases más vulnerables y desprotegidas en la localidad. Hasta ahora, que se sepa, nadie recuerda una situación contradictoria a lo aquí afirmado.
Por su puesto que, Pier Angely Camacho viuda de Ortiz es la nueva presidenta para terminar el período de la segunda administración que iniciará su esposo Carlo Mario, quien sí fue electo mediante el voto directo y universal en una elección constitucional. Ella, como marca la ley, fue votada por los integrantes del parlamento estatal, los diputados y diputadas del Congreso del Estado y por unanimidad. 35 votos a favor, una abstención; total 36 votos. El resto para los 40 no registraron asistencia a la sesión.
Hasta ahí la parte legal.
De lo que tampoco hay duda es que Camacho Montoya viuda de Ortiz, fue única propuesta del gobernador Quirino Ordaz porque decidió dar solución al tema de la intempestiva muerte de su funcionario y colaborador con sentido humanitario y no con la razón de la praxis que marca el oficio político.
No obstante, y a decir verdad, convalidamos que al menos 7 de cada 10 ciudadanos guamuchilenses apoyaban la circunstancia que hoy es una realidad. Es decir, pedían que Pier Angely los representara ante la partida sin retorno del presidente. Criterio que predominó en la consciencia y civilidad política comportada en los diputados integrantes de la fracción parlamentaria de Morena en el Congreso, que aunque la propuesta haya sido hecha por la fracción del PRI, por órdenes del gobernador, los de Morena son mayoría, y aún así, la civilidad política y el humanismo predominó.
La decisión tomada por el gobernador y que prácticamente sólo fue avalada por el Poder Legislativo, fue la más viable para su persona, su investidura, su gobierno y su partido, el PRI.
Le genera así mismo, una percepción de gobernante humano, sensible y plural, preocupado por la mujer y la familia, a su vez, evita los desgastes de confrontarse con los demás grupos políticos de su partido. Aseguramos que cualquier otra decisión, le hubiera generado mayor desgaste, no sólo político, sino también social.
Además la nueva presidenta de Salvador Alvarado asegura –dicho por ella misma– terminar con el equipo base que iniciará con el extinto ex alcalde, sin hacer tanto aspaviento antes de ser necesario. Cuidará también hasta el último día de su mandato, al grupo político de Carlo Mario, sobre todo aquellos que eran ‘carlomaristas’ de sepa y no del PRI.
Por ahora, la llegada de Pier Angely Camacho Montoya a la alcaldía asegura estabilidad y equilibrio, pero de eso a que sea en lo futuro una fortaleza política estará por verse.
Muy al pendiente.
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