Cuenta Segalmex con 800 centros de acopio en 30 estados de la República, donde recibe maíz y frijol de productores de pequeña escala. E...
Cuenta Segalmex con 800 centros de acopio en 30 estados de la República, donde recibe maíz y frijol de productores de pequeña escala.
El subsecretario Víctor Suárez afirmó que hay procesos de coordinación interinstitucional a escala estatal para apoyar con Precios de Garantía a pequeños productores de maíz y frijol; en Chiapas está por establecerse una mesa de coordinación y seguimiento donde participan organizaciones campesinas.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural estimó que en el ciclo primavera-verano 2020 las bodegas habilitadas por Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) adquirirán un millón 600 mil toneladas de maíz provenientes de 123 mil productores de pequeña escala (con menos de cinco hectáreas) de 30 estados de la República, quienes recibirán el precio de garantía de cinco mil 610 pesos por tonelada, más 150 pesos por tonelada como apoyo para transporte del grano.
Asimismo, Segalmex adquirirá 300 mil toneladas de frijol de primavera-verano 2020 y de otoño-invierno 2020-2021, con precio de garantía de 14 mil 500 pesos por tonelada; este frijol provendrá de 37 mil 500 productores de pequeña escala de 19 estados.
En cuanto a productores de mediana escala, se prevé que Segalmex beneficiará con precios de garantía a 28 mil productores de maíz de mediana escala de Chihuahua, Guanajuato, Jalisco y Michoacán en sus cosechas de primavera-verano 2020.
Durante la video conferencia “Precios de Garantía para maíz y frijol y su impacto productivo y económico en el sector rural”, se informó que, en estas acciones, Segalmex cuenta con una red de 800 centros de acopio de maíz y frijol en 30 estados del país, los cuales reciben los granos básicos que tienen como destino prioritario atender las necesidades de Diconsa para el aprovisionamiento de su red de abasto social.
El subsecretario de Autosuficiencia Alimentaria, Víctor Suárez Carrera, afirmó que el programa Precios de Garantía, que opera el Gobierno de México desde el 1 de diciembre de 2018, es una gran conquista, pues ha devuelto al Estado la atribución de regulador y equilibrador del mercado de alimentos básicos.
Esos precios, que se aplican a maíz, frijol, trigo panificable, arroz y leche, establecen pagos justos a productores de pequeña escala y también compras garantizadas de cosecha por medio de Segalmex, dijo en el foro, realizado en la edición 12 del ciclo de conferencias “Autosuficiencia alimentaria e innovación tecnológica con prácticas sustentables”.
Resaltó la colaboración interinstitucional, en cada estado de la República entre Segalmex, Agricultura e instancias como las delegaciones federales de Programas Integrales de Bienestar y organizaciones campesinas, a efecto de que el mayor número de productores se beneficien de los precios de garantía.
En este sentido, destacó que está en marcha la coordinación en ese sentido en Chiapas, con mesas de trabajo de coordinación y seguimiento para la cosecha primavera-verano 2020, y se prevé realizar prácticas similares en otros estados.
“Cuidemos este programa, no podemos permitir que sea desvirtuado por intereses ajenos o por coyotes intermediarios que, desafortunadamente, siguen presentes en el campo. Queremos que el programa tenga una correcta aplicación, sin desviaciones, y llegue a quien lo requiera”, dijo.
El director general de Segalmex, Ignacio Ovalle Fernández, destacó el apoyo que esta institución sectorizada en la Secretaría de Agricultura brindó en los primeros cinco meses del año a 65 mil 776 pequeños y medianos productores, de quienes se ha logrado un acopio de 760 mil 358 toneladas de maíz y 47 mil 900 toneladas de frijol, así como 168.5 millones de litros de leche a precio de garantía.
“Segalmex también apoyó a los campesinos que el año pasado fueron afectados por la sequía, los cuales tuvieron acceso al programa de préstamo de frijol que se llamó Kilo por Kilo y que consistió en prestar grano para siembra con la obligación de regresarlo al momento de la cosecha“, dijo.
El director del programa Precios de Garantía de Segalmex, Miguel Carrillo Villarreal, precisó que la política de Segalmex para productores de pequeña escala de maíz y frijol implica la adquisición de cosechas y la aplicación de los precios de garantía. En el caso de maíz, los productores pueden entregar cada uno 20 toneladas a los centros de acopio, y en el caso de frijol pueden entregar hasta 15 toneladas. El presupuesto que ejercerá Segalmex para la compara de maíz de primavera-verano 2020 es de nueve mil 200 millones de pesos, y para la compra de frijol en ese ciclo y en otoño-invierno 2020-2021 es de cuatro mil 300 millones de pesos.
Carrillo Villarreal añadió que, para llevar a cabo estas acciones, Segalmex cuenta con una red de 800 centros de acopio de maíz y frijol en 30 estados del país, los cuales reciben los granos básicos que tienen como destino prioritario atender las necesidades de Diconsa para el aprovisionamiento de su red de abasto, y los remanentes son comercializados a otros programas institucionales o en el mercado abierto, dijo.
El gerente de Estudios y Proyectos de Segalmex, Sergio Márquez Berber, explicó los incentivos que el programa ofrece por tonelada a productos alimentarios básicos: son de cinco mil 760 pesos para trigo, cinco mil 610 para maíz, 14 mil 500 para frijol y seis mil 120 para arroz.
Comentó que para el ciclo primavera-verano 2020 se espera apoyar a 28 mil productores de mediana escala de maíz con precios de garantía para cuatro millones 400 mil toneladas de Chihuahua, Guanajuato, Jalisco y Michoacán, siendo los criterios de elegibilidad el volumen de producción, histórico de comercialización, cumplimiento, superficie, rendimiento y número de productores, principalmente. En este caso, el grano no es acopiado.
El titular de la Delegación Federal de Programas Integrales de Bienestar en Chiapas, José Antonio Aguilar Castillejos, destacó que el año pasado esta representación participó con Segalmex en el seguimiento integral al programa Precios de Garantía y lo hizo por medio los Centros Integradores de Desarrollo, que funcionan como ventanilla única para los programas prioritarios, y de los servidores de la Nación, quienes son un vínculo entre la ciudadanía y el gobierno federal.
De esa manera, dijo, “se mitigaron posibles problemáticas sociales de campesinos que estaban desesperados por no poder vender sus cosechas”. Esta coordinación, agregó, se replicará este año.
La directora ejecutiva de la Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de Productores de Campo (ANEC), Leticia López Zepeda, expuso la política de “mercado libre” que rigió entre 1982 y 2018, lapso en el que los precios internos al productor estuvieron alineados a los precios internacionales, los cuales son vulnerables ante movimientos especulativos de las bolsas de materias primas e incluso en las financieras.
En ese periodo, comentó, rigió un “modelo de desruralización compulsiva”, con creciente concentración en pocas manos de los procesos de mercado agrícola, con volatilidad, incertidumbre y niveles bajos en los precios al productor y con una gran exclusión de los campesinos.
Aplaudió la existencia del programa Precios de Garantía, el cual, dijo, “es punto de partida para una nueva política de comercialización de granos: mercados justos, equitativos, incluyentes y con certidumbre”.
Eso es de gran importancia, si se considera que en el país tenemos 5.3 millones de unidades de producción y de ellas 73 por ciento, casi cuatro millones de unidades, se encuentran en la precariedad con ingresos anuales promedio de 32 mil pesos; 2.7 millones de unidades tienen excedentes y vinculación al mercado, y 1.2 millones son de subsistencia, indicó.
En el evento participaron también los productores de maíz Urbana Solís Sarmiento, de la región de la Fraylesca, en Chiapas, y Héctor Durán, de Progreso del Jaral, Guanajuato.
