En el Altar del Perdón, el cardenal Carlos Aguiar Retes bendijo cientos de palmas y ramos adornados con romero, manzanilla o laurel, co...
En el Altar del Perdón, el cardenal Carlos Aguiar Retes bendijo cientos de palmas y ramos adornados con romero, manzanilla o laurel, como símbolo que marca el inicio de la Pasión de Cristo y, en consecuencia, de la semana más importante del mundo católico: la Semana Santa.
Durante la homilía, el cardenal Carlos Aguiar Retes llamó a los fieles a reflexionar sobre el verdadero motivo de esta celebración.
Si yo ya he aprendido a tener las actitudes que Jesús manifiesta a lo largo de su pasión, situaciones adversas, difíciles, de traición, de persecución a muerte sin merecerla, en fin… ir escuchando el relato y preguntándonos cada uno de nosotros esta actitud que muestra Jesús en su camino a la muerte en cruz, ¿yo ya la he asumido en algún momento de mi vida?, ¿yo ya he aprendido como buen discípulo?, y si descubro que son todavía muchas las cosas que tengo que aprender de Jesús, que me motiven estos días de Semana Santa”, expresó el cardenal Carlos Aguiar Retes.
Posteriormente, se dio lectura al relato de la Pasión, según el Evangelio de San Lucas, y se oró especialmente por un mayor compromiso a favor de la paz y la justicia.
Al exterior de la Catedral, las opciones de palmas y ramos fueron diversas.
Carmen compró de todos los tamaños.
Éste grande para mi sala, este para mi recámara y éste para la entrada para que entre uno y sale uno, es una muestra de que esté uno con Dios”, indicó Carmen, testimonio.
Llegaron en familia, siguiendo la tradición.
Si mire, compré mi palmita, me la bendijeron en la iglesia, es la tradición, y a parte el significado de Jesucristo”, señaló un testimonio.
Es el Domingo de Ramos cuando Jesucristo entró a Jerusalén y todos los recibieron con palmas”, comentó otro testimonio.
Después de la bendición, los feligreses llevaron las palmas a sus hogares como recordatorio de la fe incondicional.
La fe se vive a través de los principios morales, a través de los valores, de nada sirven los ritos si uno no se transforma, y a esto nos lleva la Cuaresma y, particularmente, la Semana Santa”, dijo el padre José de Jesús Aguilar, responsable del área de Radio y Televisión del Arzobispado de México.
