La confusión y el temor se apoderó de Países Bajos, ayer, luego de que un hombre disparara al interior de un tranvía, matara a tres e...
La confusión y el temor se apoderó de Países Bajos, ayer, luego de que un hombre disparara al interior de un tranvía, matara a tres e hiriera a unas nueve personas, según informaron autoridades de Utrecht, uno de los centros religiosos más fuertes en Europa. Apenas tres días después del atentado islamófobo en Nueva Zelanda, la pregunta sobre si el atacante de Holanda se identifica con algún grupo extremista, fue casi obligada entre la prensa internacional y las autoridades.
Se trata de Gökmen Tanis, de 37 años y de origen turco; fue detenido después de darse a la fuga tras perpetrar el crimen, la mañana de ayer, cerca de la Plaza 24 de Octubre. Las autoridades también capturaron a otros dos hombres vinculados con el sospechoso, incluso a su hermano, de quien se sabe, formó parte del Movimiento Safista, una organización islámica ultraconservadora que quedó prohibida en Alemania.
En un primer momento, el Servicio Nacional Antiterrorista de Países Bajos indicó que el tiroteo “tiene todas las características de un atentado terrorista” y, en consecuencia, el gobierno elevó a cinco (el máximo) el nivel de alerta de seguridad nacional, algo inédito en una de las naciones más seguras del mundo, donde en los últimos años se han tenido que cerrar alededor de 20 cárceles por falta de delincuentes.
El portavoz policial Bernard Jens puntualizó que, aunque se baraja el móvil terrorista, “también podría ser un crimen en la esfera de las relaciones personales”, una línea a la que se ha ceñido la Justicia local.
“Tenemos en cuenta el móvil terrorista, pero no podemos excluir otros motivos”, declaró un portavoz de la Fiscalía.
Testigos citados por la cadena holandesa NOS contaron que el atacante se centró en una mujer y se dirigió también contra quienes intentaron ayudarla.
Medios neerlandeses señalan que Tanis era un viejo conocido de la policía, pues está procesado por una violación denunciada en 2017 por una mujer que asegura que no sólo la violó sino que la maltrató. También tendría antecedentes por tentativa de homicidio, robo con violencia y conducir ebrio, entre otras cosas.
Por su parte, la agencia de noticias oficial de Turquía, Anatolia, aseguró, al citar a familiares de Tanis, que el sospechoso disparó contra un pariente por motivos familiares.
El Ministerio de Exteriores de Turquía condenó “enérgicamente” los hechos, “con independencia de la identidad del atacante o sus motivaciones. Ante este ataque, expresamos nuestra plena solidaridad al pueblo holandés”, reza la nota oficial.
No obstante, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, comentó el interés de su gobierno por saber si el tiroteo en Utrecht fue un ataque terrorista o un suceso y por ello los servicios de Inteligencia ya lo están investigando, reveló.
Mientras, al cierre de edición, el servicio de tranvía continuaba suspendido a la espera de que concluyeran los trabajos para la investigación; se espera que se reanude esta mañana. Precisamente las autoridades anunciaron que hoy las banderas nacionales ondearán a media asta en los edificios oficiales en señal de duelo por las víctimas.
“Si es un acto de terror, sólo hay una respuesta: nuestro Estado de Derecho y nuestra democracia son más fuertes que la violencia”, dijo el primer ministro, Mark Rutte, en su comparecencia de ayer.
Rutte anunció la suspensión de las jornadas de campaña para las elecciones regionales de este miércoles.
Desde la UE, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, escribió en Twitter: ”La UE está junto a Países Bajos y su pueblo en estos difíciles momentos. Mis pensamientos están con los heridos y sus familias”.
En la misma línea, el presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, trasladó su solidaridad a las familias de las víctimas. “Europa debe permanecer unida frente a la violencia y los ataques contra nuestros ciudadanos”.
La canciller alemana, Angela Merkel, también siguió “con interés y preocupación” los sucesos de Utrecht, según el portavoz de su gobierno, Steffen Seibert.
Y el presidente francés, Emmanuel Macron, expresó su repugnancia por “la misma violencia sangrienta. Estamos con ustedes en el duelo y en la determinación para luchar contra quienes quieren imponer el terror”, escribió en Twitter.