Los dolores que sufre la cantante derivados de la fibromialgia han hecho que tenga que cancelar el concierto que tenía previsto en Río de J...
Los dolores que sufre la cantante derivados de la fibromialgia han hecho que tenga que cancelar el concierto que tenía previsto en Río de Janeiro
Con un documental a punto de estrenarse, una gira musical todavía en marcha y otra de promoción de la pieza audiovisual entre manos, Lady Gaga confesó al mundo (durante una rueda de prensa) dos cosas: que tenía previsto retirarse de la música temporalmente y que padece fibromialgia, una enfermedad crónica que causa dolor muscular intenso generalizado. Y las dos determinan el futuro lejano, pero también el próximo y, por supuesto, el presente; perfilándolo ahora mismo de un modo poco halagüeño: Lady Gaga ha tenido que ser hospitalizada y se ha visto obligada a cancelar un concierto que tenía previsto en Río de Janeiro.
Hace doce horas, la cantante compartía una foto en su perfil de Instagram en la que puede verse su brazo con una vía sobre lo que se intuye es una cama de hospital. “Brasil, estoy devastada por no estar lo suficientemente bien como para ir a Rock In Rio”, escribía la cantante junto a la imagen. “Haría lo que fuese por vosotros, pero tengo que cuidar de mi cuerpo ahora mismo. Pido vuestra comprensión y os prometo que volveré para actuar para vosotros pronto. Lo siento mucho, y os quiero mucho”.
Apenas una hora después, otra imagen, a modo de comunicado, aparecía en el perfil. “Lady Gaga está sufriendo dolores físicos graves que han afectado su capacidad para actuar. Como resultado, tristemente tiene que retirarse de la actuación de este viernes”, continuaba. “Lady Gaga está bajo los mejores cuidados médicos. Manda amor para todos sus fans en Río y les agradece su comprensión y apoyo”.
Los mensajes de, efectivamente, apoyo, no se hicieron esperar, pero quizás por algunos poco amigables o comprensivos, quizás porque la cantante sentía la necesidad de dar más explicaciones, hubo una tercera imagen de su nuca con las siguientes palabras:
“He ido al hospital, no es sencillamente dolor de cadera o desgaste de la carretera, tengo dolores severos. Pero estoy en las mejores manos y con los mejores médicos. Por favor, no olvidéis que os quiero. Recuerdo cuando hace años tatué mi cuello en Río, el tatuaje fue escrito por niños en las favelas. Río, tienes un lugar especial en mi corazón. Te amo”.